Escrit en l'aire

informació obra



Autoria:
Moisès Maicas
Coreografia:
Cesc Gelabert
Text:
Valère Novarina, La Calòrica
Traducció:
Sabine Dufrenoy, Anna Soler Horta
Direcció:
Moisès Maicas
Intèrprets:
Cesc Gelabert
Composició musical:
Borja Ramos
Direcció Musical:
Borja Ramos
Escenografia:
Toni Giró
Vestuari:
Lydia Azzopardi
Il·luminació:
Conxita Pons
Producció:
Grec 2016 Festival de Barcelona, Gelabert Azzopardi Companyia de Dansa
Companyia:
La Calòrica
Estrena:
Grec 2016
Sinopsi:

La trobada del coreògraf i ballarí català Cesc Gelabert amb l’escriptor, pintor i director d’escena francès Valère Novarina crea un espai d’acció i de pensament transcendent per a una mirada que vol viure Europa des de la plenitud artística. La unió del món místic de Gelabert, que dansa sempre ple de paraules velades que només arriben al públic de manera abstracta per mitjà del silenci del moviment, i l’univers filosòfic de Novarina, que emana un torrent inesgotable de llenguatge inèdit, permetrà al públic escoltar per primera vegada les paraules que secretament habiten en el cos del ballarí quan dansa.

Escrit en l'aire proposa un ritual, el procés alquímic en què el ballarí dansa la paraula i l’escriptor escriu el moviment.

Premi de la Crítica 2016 categoria de solo

Premi de la Crítica 2016 categoria música (Borja Ramos)

Finalista a la categoria de coreografia dels Premis de la Crítica 2016

Crítica: Escrit en l'aire

15/07/2016

CAMALEÓNICO GELABERT

per Carmen del Val

Con 63 años a la espalda y una dilatada carrera profesional como bailarín y coreógrafo Cesc Gelabert se marca una pirueta y se convierte en un convincente actor en Escrit en l’aire. Un delicioso y versátil espectáculo que nace del encuentro del bailarín catalán con el escritor, pintor y director de escena Valère Novarina, encuentro que propició el director teatral Moisès Maicas, los tres han ideado una pieza redonda de estilo surrealista donde texto y movimiento están equilibrados de forma que su desarrollo en clave divertida y  vanguardista es una bocanada de aire fresco para el espectador. La magia y sorpresa que destila el montaje recuerda el universo creativo del artista catalán Joan Brossa (Barcelona 1919-1998).  Al final del espectáculo el público puesto en pie emocionó al intérprete con sus cálido aplausos y bravos. Incluso algunos anti-Gelabert, declarados, presentes en la sala, aplaudieron a rabiar.

Escrit en l’aire se nutre de textos de diferentes libros  de Novarina como son  Carta als actors (1989), Per a Louis de Funès (1989), Lumière du corps (2006), L’envers de l’esprit (2009) i La quatrième personne du singulier (2012), entre otros. Desde el primer minuto del espectáculo Gelabert no cesa de recitar estos escritos, que presentan una gran dificultad por lo enrevesado de su mensaje, pero él no titubea ni se atora, todo lo contrario lo dice con buena dicción y fluidez. Viendo el montaje el espectador tiene la sensación que el intérprete baila la palabra y que el filósofo escribe el movimiento. Por otro lado la faceta de pintor y dibujante de Novarina ha permitido a través de esculturas, diseñadas y construidas por Toni Giró,  enmarcar la palabra y el baile de esta obra.

Con una forma física envidiable el vocabulario coreográfico de Gelabert se engarza como una piedra preciosa en cada una de las esculturas geométricas que cercan los diferentes textos: prisma blanco, máscara, metro, cuerda y círculo. “N’estic tip, de ser un cadáver que viu” grita el bailarín mientras se introduce en un estructura metálica en forma de prisma. Otro de los momentos impactantes del montaje es el que Cesc intenta colgarse de una cuerda repitiendo sin parar. “Em dic Caín del Tub. He feridurat al meu germa…”. Hipnótico el juego con la máscara y con el prisma blando.

Hay dos colaboraciones magníficas que ayudan a convertir a este Escrit en l’aire en una pieza inolvidable: la excelente música original de Borja Ramos y el elegante y adecuado vestuario diseñado por Lydia Azzopardi. También hay que destacar las sugestivas luces de Conxita Pons.

Escrit en l’aire se traducirá en castellano para su presentación en el marco del  próximo Festival de Otoño de Madrid y en francés para la gira que preparan en el país vecino. Gelabert vive un momento dulce como bailarín y coreógrafo, tras  tras su rotundo éxito bailando  la Soleá de El Güito en la pasada edición de Ciutat Flamenco de  Barcelona, prepara su segunda  coreografía  Mijaíl Barishnikov, que se estrenará en 2017 en la ciudad de Nueva York.