The Winter’s Tale de la nova Kenneth Branagh Theatre Company

En el viejo Garrick se ha instalado la nueva Kenneth Branagh Theatre Company. Es su temporada inaugural y The Winter’s Tale el primer montaje de un elenco en el que figuran, entre otros, Judi Dench y Michael Pennington. La sala es una restaurada bombonera en crema y oro y el escenario posee las medidas para el lucimiento de un gran actor inglés del siglo VIII. Se abre el telón y la corte siciliana del rey Leontes se ha convertido en un teatrín, en un noble complemento para la casa de muñecas de la reina Mary. Alrededor del árbol de Navidad se reúne la familia para ser retratada al descuido por Lewis Carroll en un instante de felicidad. El príncipe Mamillius es el rey, como todos los niños de las estampas eduardianas. Los criados despliegan una sábana para proyectar alegres recuerdos compartidos, mudos y en movimiento. El cine como lujosa linterna mágica. La luz de las candilejas aporta al conjunto la incandescente ensoñación que requiere un cuento de invierno.

Rob Ashford y Kenneth Branagh han tomado el título de la obra de Shakespeare de manera literal. Toda la puesta en escena es un viaje por los paisajes de las fábulas decimonónicas. La feliz expectación antes de la pesadilla de Hoffmann, la picaresca navideña de Dickens, la tristeza helada de Andersen. Un delicado envoltorio para una dramaturgia que sajará a consciencia la belleza inocente. El tono dominante es oscuro: la congoja y desazón que generan unos celos presentados como un trastorno físico; enfermedad que irrumpe con todo su dolor y capacidad de destrucción en medio de una armonía que parecía inmune al mal. Cierto, ahí está el bucólico cuarto acto, aquí imaginado como un ritual de fertilidad, con Perdita coronada como su reina. Un interludio para volver pronto al desenlace –la curación– de un muerto en vida que es Leontes y su corazón helado.

Adulto y denso es también el repertorio de excelentes interpretaciones. Michael Pennington abandona a la niña Perdita con un parlamento que parece animar con puras emociones al muñeco, y Branagh está excelso en su descenso a los infiernos de una sospecha que actúa en su cuerpo y mente como sosa cáustica. Pero la sala sólo aguanta la respiración con la defensa que hace la reina Hermione de su inocencia (serena y majestuosa Miranda Raison, como una dama de Shalott), y con la autoridad que exhibe Judi Dench en cada palabra que pronuncia. Eterna como una figura encerrada en una bola de cristal cuando interpreta la alegoría del Tiempo, y telúrica cuando asume el papel de Paulina. Con un dominio absoluto –como todos– de la prosa shakespeariana. Es indescriptible que con sólo proferir con cólera bridada la palabra “tirano” explote en la mente del espectador todos los significados de la acusación.  

Juan Carlos Olivares

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The Winter’s Tale  

De William Shakespeare. Dirección: Rob Ashford y Kenneth Branagh. Principales intérpretes: Tom Bateman, Kenneth Branagh, Jessie Buckley, John Dagleish, Judi Dench, Hadley Fraser, Michael Pennington, Miranda Raison y John Schrapnel. 

Garrick Theatre, Londres, 7 / 12 / 2015